fuera... por nuestra propia culpa sufrimos la invasión, Juan, nuestra culpa
es ser débiles, flojos, por eso nos eligió el invasor. En la manada, el animal
enfermo sin fuerzas es el que atrae al león... ¡El león caza al débil, nunca al
fuerte!
Fue, sin embargo, el dibujo de Breccia la causa enarbolada por el editor
para apurar su final. Guillermo Saccomanno la describe como
un relato lúcido, que arranca lenta y puntillosamente el trazado de una
metáfora: la invasión. En la medida en que el relato profundiza en las
contradicciones de un grupo humano, que debe actuar, pensar y volver a
actuar siempre en grupo para defender su condición humana, el editor
responsable de la revista Gente, en la cual se publica la obra, decide
abortarla con final precipitado.
La segunda parte es una historia de la resistencia guerrillera, con una
ciudad diezmada, ya ganada por "Ellos". Oesterheld, que se incluye en la
historia como narrador y acompañante de Salvo, escribió los guiones
desde la clandestinidad y, de hecho, Solano López llegó a plantear dudas
sobre autoría de los últimos por algunos elementos temáticos “raros” y
el hecho de que estuvieran mecanografiados cuando, en general, le
llegaban manuscritos. Como sabemos, Oesterheld fue secuestrado por
las fuerzas armadas el 27 de abril de 1977.
El Eternauta es un contrapunto ideológico de Starship Troopers. A
diferencia de la obra de Heinlein, donde una estructura militar
institucionalizada se presenta como solución a los problemas sociales, la
obra de Oesterheld propone la resistencia horizontal, colectiva y solidaria
como respuesta a la amenaza externa, como él mismo escribiera en el
prólogo: “El héroe verdadero de El Eternauta es un héroe colectivo, un
grupo humano. Refleja así, aunque sin intención previa, mi sentir íntimo: